La embajadora - Costa Rica
La embajadora
Christine Pirenne
Puede consultar el curriculum vitae de la embajadora Pirenne en rijksoverheid.nl (en neerlandés)
Desde Costa Rica, la embajadora y su equipo cubren cinco países: Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua y Costa Rica. Dos veces al año se hace una embajada móvil (pop-up embassy), donde “trasladamos a todo el equipo a uno de los otros países y trabajamos desde una oficina que montamos en cada lugar”. Además, la embajadora viaja frecuentemente a los otros países con el objetivo de fortalecer las relaciones bilaterales y participar de actividades y eventos.
¿Cómo es ser embajadora en varios países de América Central?
“Es un reto pero a la vez sumamente enriquecedor. Buscamos tener un enfoque regional. Cada país tiene su propio carácter, sin embargo también hay muchos aspectos que tienen en común. Somos conscientes del contexto político, social, económico y cultural único de cada país y hay asuntos bilaterales en que trabajamos directamente con las autoridades de un país. Pero hay desafíos que traspasan la frontera y que necesitan un abordaje regional, como por ejemplo la lucha contra el cambio climático y la protección de los derechos humanos. Hemos experimentado de primera mano el gran valor agregado de las alianzas que se construyen entre sociedad civil, academia y sector privado de los diferentes países que trabajan con un objetivo común. Por ejemplo, la lucha contra la discriminación y violencia en contra de grupos vulnerables, el intercambio y capacitación de periodistas de toda la región para incrementar su seguridad y resiliencia, o el programa regional dirigido a jóvenes de Guatemala, Honduras y El Salvador para dialogar sobre la importancia de la democracia y el diálogo para construir sociedades más inclusivas, justas y prósperas.
“Varias veces al año, somos una embajada móvil. Trasladamos a todo el equipo a uno de los otros países y trabajamos desde una oficina que instalamos en cada lugar. Nos acompaña prácticamente todo el personal. Cada colega tiene su propio programa y procuramos aprovechar el tiempo lo mejor posible. Así estamos más cerca de nuestros socios y podemos visitar también a ciudadanos neerlandeses para brindarles servicios consulares. Es una actividad realmente agradable que fortalece las relaciones con los diferentes sectores y organizaciones socias y brinda un enorme impulso para las relaciones interpersonales del equipo”.
¿Cuáles son los temas más importantes en los que colaboran los Países Bajos y los países de América Central?
“La prestación de servicios consulares y económicos a los ciudadanos neerlandeses en la región es muy importante para la embajada; son tareas fundamentales. Además, nos centramos en tres temas que son relevantes para el Reino de los Países Bajos: 1. la democracia, los derechos humanos y el derechos internacional, 2. la lucha contra el tráfico internacional de drogas, 3. la lucha contra el cambio climático. Nuestro programa en derechos humanos se centra en la promoción de los derechos y la protección de grupos vulnerables como periodistas, mujeres, niñas, personas de la comunidad LGBTIQ+, operadores de justicia y personas defensoras de derechos humanos. Un ejemplo es el Shelter City (Ciudad Albergue): apoyamos a una organización no gubernamental en Costa Rica que ofrece un refugio temporal para personas defensoras de los derechos humanos de Centroamérica que enfrentan algún tipo de riesgo por el trabajo que realizan. Este albergue les brinda un lugar seguro, para recuperar la tranquilidad y crear resiliencia.
¿Sobre qué otras cuestiones existe también colaboración?
“También trabajamos en el desarrollo de puertos y de la logística portuaria. Existen muchos retos con los que los Países Bajos pueden apoyar, como el dragado de puertos. Costa Rica al tener el principal puerto de exportación a Europa, es también donde lamentablemente transita una gran cantidad de cocaína hacia Europa y los Estados Unidos. Es preocupante, porque la cocaína se consume en los Países Bajos y en Europa. Trabajamos para aumentar la seguridad de los puertos, por ejemplo, fomentando que nuestras aduanas trabajen juntas e intercambien información”.
“Costa Rica es mundialmente conocida como pionero en la lucha contra el cambio climático y debemos aprovecharlo. Centroamérica sufre de sequías, huracanes, inundaciones y otros desastres naturales. Siempre que es posible, actuamos como un ente facilitador, compartiendo tecnologías, soluciones e innovaciones neerlandesas que promovemos a través de la sección económica de la Embajada”.
“Una cuestión especial de la que también se ocupa la embajada es el asesinato de los cuatro periodistas Neerlandeses de IKON TV el 17 de marzo de 1982, Koos Koster, Jan Kuiper, Joop Willemsen y Hans ter Laag en El Salvador, durante el conflicto armado. El caso aún no ha sido resuelto y es doloroso, sobre todo para los familiares, pero también para el Estado neerlandés. Exigimos justicia 42 años después”.
¿Trabajan también los Países Bajos con los países de América Central en el aspecto político?
“En el ámbito político y en los foros internacionales defendemos la protección de la democracia, el estado de derecho y el derecho internacional. Valores que compartimos con el gobierno de Costa Rica. En toda la región buscamos una agenda positiva y un diálogo abierto no sólo sobre asuntos que nos unen, como la lucha contra el cambio climático, sino también asuntos que vemos desde otras perspectivas. Lamento que Nicaragua haya decidido unilateralmente quebrar las relaciones diplomáticas con el Reino de los Países Bajos y que haya cerrado este canal de diálogo. Sin embargo, seguiremos apoyando a la sociedad civil y al pueblo de Nicaragua que buscan volver a la democracia y luchar por el respeto por los derechos humanos en su país.”
¿Qué espera conseguir en los próximos años?
“Espero, entre otras cosas, poder avanzar en los acuerdos entre las autoridades aduaneras de Costa Rica y los Países Bajos. Hace poco hemos firmado un acuerdo de cooperación. No quiero dejar este país sin haber actuado en ese terreno; no estaría satisfecha si todo queda en un trozo de papel. Todos los miembros del equipo haremos lo necesario para procurar que el contenido del mismo sea realista.”
¿Qué consecuencias ha tenido la pandemia de COVID en los países donde ustedes trabajan?
“Las consecuencias del COVID aquí han sido enormes. Además de un incremento en la pobreza y la desigualdad, pudimos comprobar cómo hay un retroceso en los derechos humanos y se ha reducido el espacio para las organizaciones de la sociedad civil. En Costa Rica, la pandemia tuvo sobre todo impacto en el turismo. Prácticamente desapareció, y todavía no se ha alcanzado el nivel anterior. También tuvo consecuencias para nuestro equipo. La organización del trabajo fue más complicada: mejoraban las condiciones, volvíamos a la oficina, empeoraban otra vez, de nuevo a trabajar en casa. Pero por suerte la embajada y los servicios consulares estuvieron siempre abiertos y ahora trabajamos al menos tres días desde la embajada. Y eso me satisface.”